El gobernador de Yucatán, Joaquín Díaz Mena, reconoció el impacto del paro protagonizado por 7,600 maestros estatales, el cual dejó sin clases a más de 30 mil estudiantes en todo el estado.
El movimiento, que tomó fuerza este lunes, afectó principalmente a escuelas de nivel básico en Mérida y diversos municipios del interior. Representantes del magisterio yucateco señalaron que mantendrán la suspensión de labores hasta obtener respuestas claras al pliego petitorio entregado a las autoridades estatales.
