By La llamada llegó desde Pittsburgh. Derrick Harmon, un joven forjado en uno de los barrios más peligrosos de Detroit y con pasado en la trinchera de la Universidad de Oregon, acababa de convertirse en selección de primera ronda del Draft 2025 de Steelers. Un sueño con casco negro y pantalones dorados. El tipo de noticia que cambia la vida.
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Minutos después de escuchar su nombre en el escenario del Draft, Harmon se dirigió al hospital. Su madre, Tiffany Saine, lo esperaba. Desde 2022, un derrame cerebral la había dejado inmóvil, sostenida apenas por máquinas, pero nunca desconectada del amor de su hijo. Ella siempre fue su inspiración, su motor, su entrenadora emocional. Una madre soltera que lo creció para no dejarse nunca vencer en la vida.
“Mamá, tu hijo llegó a la NFL”, alcanzó a decirle Derrick. No hubo respuesta. Sólo paz. Tiffany murió poco después de recibir la noticia. Como si hubiera esperado ese instante para marcharse con la certeza de que su misión en la vida estaba terminada.
Harmon, en medio de los reflectores, las entrevistas, las promesas de contratos millonarios, se quebró. En conferencia de prensa dio a conocer el estado de salud de su madre y que en breve se dirigiría al hospital.
La carrera en la NFL de Harmon comenzó con un duelo. Pero también con un legado: el de una madre que no soltó la mano de su hijo hasta estar segura de que había llegado a la cima.
Steelers compartió ayer por la mañana la noticia
En nombre de toda la organización de los Pittsburgh Steelers, transmito nuestras más sinceras condolencias a Derrick Harmon y su familia en estos momentos difíciles”, declaró el propietario y presidente Art Rooney II en el comunicado
Statement from Steelers President Art Rooney II: pic.twitter.com/AKDzDefoZU
— Pittsburgh Steelers (@steelers) April 25, 2025
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